El 18 de junio, el Papa Francisco lanzó su tan esperada encíclica sobre el medio ambiente. En esta innovadora carta, declara al cambio climático como uno de los mayores desafíos de la humanidad. Dan Kammen, ganador del Premio Nobel de la Paz en 2007, y experto de la Alianza de Energía y Clima de las Américas (ECPA), colaboró en la redacción de este documento de la Santa Sede. El liderazgo del Papa y el conocimiento de este experto de la ECPA marcan el camino hacia un futuro sostenible para las Américas.
«El apoyo del Papa en la lucha contra el cambio climático puede salvar la vida de millones de personas en riesgo y en comunidades pobres en todo el mundo», dijo el Dr. Kammen. El contenido de la Encíclica Laudato Si puede cambiar las reglas del juego al presentar las consecuencias ambientales, sociales, económicas y políticas del cambio climático, las cuales afectan de manera desproporcionada a las personas más pobres del mundo. Esta carta es particularmente importante para la región, ya que cinco de los diez países más afectados por el cambio climático se encuentran en América Latina y el Caribe.
La Encíclica Laudato Si propone cambios en los estilos de vida y alternativas para frenar el calentamiento climático. Para su redacción, el Papa Francisco Convocó al Dr. Kammen, profesor de la Universidad de California en Berkeley y autoridad mundial en materia de cambio climático, quien lo asesoró en temas relacionados a las energías renovables y el cambio climático. Este tema se compenetra de manera armoniosa con el mensaje de la Encíclica del Papa latinoamericano, ya que en el mundo existen mil cuatrocientos millones de personas que no tienen acceso a la electricidad. Para ellos la energía renovable representa una opción efectiva, pues ayuda a conectar a las comunidades más pobres y respeta al planeta.
Con un mensaje fundamentalmente claro, el Papa declara al cambio climático como uno de los mayores desafíos de la humanidad y afirma que el cuidado del planeta —nuestra casa común— es una obligación moral. Este componente espiritual es quizá el que faltó en la Conferencia de las Partes de Copenhague, donde no se logró un acuerdo, y que estará presente en diciembre en París, que contará por primera vez con la participación de un Papa.
La presencia del Papa en este encuentro puede cambiar significativamente el rumbo de los debates, ya que dejaría de ser una mera discusión entre conservadores y liberales y entre quienes afirman que el cambio climático es consecuencia de la actividad humana y quienes rechazan esta teoría. Asimismo, su presencia integra por primera vez la premisa de que el bienestar del planeta es un derecho de todos, ajeno a la ideología.
Dr. Dan Kammen fue parte de los “Senior ECPA Fellows”, una iniciativa de la Alianza de Energía y Clima de las América financiada por el Departamento de Estado de los EE.UU., y ejecutada por “Partners of the Americas”.