El 18 de noviembre de 2013, en una reunión convocada por la OEA y el Diálogo Interamericano, el Secretario Kerry habló a favor de la cooperación entre los países del Hemisferio basada en una relación entre iguales que apunte a fortalecer la democracia, invertir en educación y luchar contra el cambio climático. Al referirse a la prosperidad en las Américas, Kerry dijo que “una de las oportunidades que se nos presenta es la de un mercado de 6 billones de dólares con 4 mil millones de usuarios. Me refiero al mercado de la energía”. El Secretario Kerry subrayó que el mercado de la energía “nos ayudará a responder la pregunta sobre si le dejaremos o no a nuestros hijos y a nuestros nietos un planeta saludable, limpio y sostenible”. Enfatizó que la región tiene una oportunidad única de desempeñar un papel central en el campo de la energía limpia. “Las Américas se convirtieron en el nuevo centro del mapa energético mundial. Nuestro Hemisferio provee un cuarto del petróleo crudo mundial y casi un cuarto de su carbón. Apoyamos más de un tercio de la electricidad mundial. Esto significa que tenemos la capacidad y la responsabilidad de influenciar la forma en la que el mundo entero se abastece de energía”, concluyó.

Al hablar de los retos ambientales, el Secretario Kerry afirmó que “el cambio climático es real; está sucediendo. Si no tomamos medidas significativas como socios, continuará amenazando no solo nuestro medio ambiente y nuestras comunidades, sino nuestro estilo de vida en su totalidad”. Agregó que “los efectos negativos del cambio climático nos costarán mucho más que las inversiones que hoy debemos realizar para evitarlos”. Kerry destacó que la lucha contra el cambio climático es una prioridad urgente para el Presidente Obama, cuya administración reveló un nuevo plan de acción sobre el clima que define una política nacional más agresiva con respecto al cambio climático. “Muchas otras naciones del Hemisferio también están trabajando intensamente para hacer su parte” dijo Kerry, y agregó que “me enorgullece decir que, como integrante de la Alianza de Energía y Clima de las Américas, Estados Unidos ha colaborado con más de dos docenas de países de América Latina y el Caribe a fin de apoyar programas efectivos que aborden la realidad de esta grave amenaza”. Mencionó los decisivos avances que se están logrando en energía limpia y alentó a la región a compartir su experiencia a fin de desplegar nuevas tecnologías como una forma de desarrollar un mercado energético más limpio, intenso y sostenible.