Boletín de noticias de la ECPA

Trinidad y Tobago

jueves, marzo 19, 2015

«En Trinidad y Tobago contamos con capacidad humana para la innovación, disposición para escuchar nuevas ideas y visión para alcanzar la excelencia en todas las dimensiones del ser humano». Honorable Primer Ministra Kamla Persad Bissessar en la Cumbre sobre el Clima de las Naciones Unidas, el 23 de septiembre de 2014.

Estas declaraciones fueron hechas en reconocimiento a las nuevas estrategias que Trinidad y Tobago ha emprendido para diversificar la matriz energética, aumentar el despliegue de tecnologías de energía renovable y mejorar la eficiencia energética.

Actualmente los esfuerzos se enfocan en la eficiencia energética de la industria, puesto que la reducción de emisiones de dióxido de carbono en este sector es una prioridad nacional.

Asimismo, se está haciendo hincapié en la incorporación del transporte con bajas emisiones de carbono, incluyendo un plan de Gas Natural Comprimido (GNC) por un monto de US$300 millones. El objetivo es implementar varios incentivos como el aumento de los puntos de entrega de GNC, exenciones fiscales para los vehículos de GNC importados y conversión del sector de transporte masivo de diésel a GNC.

Como parte del enfoque de mitigación del cambio climático se busca fomentar el despliegue de tecnologías de energía renovable mediante tarifas que favorezcan su inserción en la red eléctrica, aplicación de modificaciones legislativas, adaptaciones técnicas y paquetes de régimen fiscal mediante las políticas en marcha. Con ello se abre el camino para el rápido desarrollo de la energía solar fotovoltaica, eólica y de biomasa como fuentes de generación de energía eléctrica de la red nacional.

Un componente principal de estos esfuerzos es la iniciativa piloto de recambio de bombillas (Pilot Lightbulb Exchange Initiative). Esta actividad permanente del Ministerio de Energía y Asuntos Energéticos demuestra que los pequeños cambios en el uso de la energía pueden tener una gran diferencia en el medio ambiente y la economía. El programa se lleva a cabo en las zonas rurales de bajos ingresos, y los resultados preliminares demuestran que los beneficiarios disminuyeron su consumo eléctrico y que sus facturas se redujeron gracias a simples pero eficaces cambios adoptados en sus rutinas diarias. Si bien la economía de Trinidad y Tobago se basa en el gas natural, cuenta con una de las tarifas de electricidad más bajas de la región. Lo anterior fue reconocido a nivel internacional por la revista Petroleum Economist, quien otorgó el premio a la Iniciativa de Energía Limpia en el 2014.

La Campaña Nacional de Comunicaciones de Energía continúa en medios de comunicación nacionales y en línea con el objetivo de informar y educar a la población en energía, eficiencia energética y energías renovables. Ésta incluye un sitio web único, ganador de premios: www.myenergytt.com.

El Gobierno ha hecho importantes inversiones de capital en el equipamiento de centros comunitarios, escuelas, bahías de vigilancia de la policía y zonas costeras con iluminación solar fotovoltaica desconectada de la red. Cada año se duplica la cantidad de estas instalaciones.

En enero de 2015, la Primera Ministra anunció que Trinidad y Tobago liderará un Fondo Temático de Energía del Caribe para los Estados miembros de CARICOM, en el que se aborde la seguridad energética regional durante la primera Cumbre de Seguridad Energética del Caribe a realizarse en Washington DC. Se propuso trabajar con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco de Desarrollo del Caribe (BDC), el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y otros donantes internacionales y amigos del Caribe y del sector privado para proporcionar el método y los medios para lograr la seguridad energética de una manera eficiente y sostenible, con una inversión inicial de mil millones de dólares.

Estos logros continuarán impulsando la energía renovable y la eficiencia energética para construir una Trinidad y Tobago energéticamente más diversa, reducir las emisiones de CO2 y fomentar el reconocimiento de la necesidad de utilizar la energía de manera prudente y conservadora. Sólo de esta manera podemos verdaderamente mitigar el cambio climático y preservar nuestro planeta para las generaciones venideras.